Cuando empezó las series de los grabados al linóleo, Picasso solo había hecho algunos grabados en madera (xilografías), pero inmediatamente logró una rápida adaptación a esta nueva técnica a la vez que interpretó la forma de grabar sobre un material tan blando. El taller consiste en dar a conocer el linograbado mediante la experimentación y usando la técnica utilizada por el artista malagueño.